domingo, 5 de maio de 2013

Violeta Parra: Bordadeira e Tecelã da Identidade Latinoamericana

Teatro Plaisance. Paris, Francia. 1963

A proposta deste texto é, sem considerar uma abordagem linear ou descritiva, tocar em alguns aspectos referentes à vida da artista Violeta Parra; contar um pouco dessa companheira que em tempos de colonialismo em América Latina, seguiu vivendo e conhecendo aquela realidade inquietante.    
Nascida em 04 de Outubro de 1917, no sul do Chile, “Violeta de Mayo”, nome dado ao vinil do ano de 1942 e ao seu grupo artístico, canta a linguagem do povo e de sua cultura.
Precursora do Movimento Canção Popular de Protesto, ou Movimiento da Nueva Canción
En la Carpa de La Reina, junto a "Los Choclos",
músicos bolivianos. 1965.
Chilena, orientou toda uma geração de artistas posterior às décadas de 50/60 no Chile e em outros países de América Latina. Podemos lembrar Victor Jara, assassinado pela ditadura do general Pinochet, Patricio Manns, exilado por 17 anos, os grupos musicais Inttiillimani e Quilapayún, Rolando Alarcón, Joan Jara, Joan Baez, Mercedes Sosa. Também  influenciou o compositor e folclorista argentino Atahualpa Yupanqui, Ali Primera da Venezuela e o cubano Silvio Rodríguez.
Sua investigação se inicia em 1953. Sai em busca do resgate da cultura campesina em um Chile que se moderniza. O resultado desta pesquisa é a compilação de 3.000 canções em vinil intitulado “Cantos Folclóricos Chilenos” de 1959, a montagem da peça teatral “La celebración de la minga” e uma produção musical voltada a este campo.
Neste inicio de década, ano de 1954, aconteceram também suas primeiras apresentações em rádio com o programa “Canta Violeta Parra”. Ela diz: “encuentro folklore en todas las partes... hasta en la Plaza de armas. Los ancianos me orientan; donde veo una cabeza blanca me siento y empiezo a preguntar”.
Assim, o resgate da cultura de raiz influencia em suas composições. Compõe músicas retratando a realidade social do Chile. Suas apresentações acontecem, sobretudo, em bares e espaços culturais, dentre eles La Peña de Los Parra e La Carpa de La Reina na periferia do Chile e La Peña Naira em La Paz/Bolívia onde canta campo e metrópole, a partir do que o povo pedia - tangos, cuecas, toadas, boleros, rancheras. Da mesma forma, em suas viagens à Europa, buscou bairros latinos para suas apresentações com seu violão de 25 cordas, o cuatro e o charango, instrumentos venezuelano e boliviano/peruano respectivamente.
Em suas composições Violeta expressa o amor, a vida, as injustiças.
“¡Qué vamos a hacer con tantos y tantos predicadores!  Unos se valen de libros, otros de bellas razones; algunos de cuentos varios milagros y apariciones, los otros de la presencia de esqueletos y escorpiones, mamita mía! los escorpiones!” 
Em outra estrofe dedicada à astronauta Valentina Terescova evoca: “¡Qué vamos a hacer con tanto tratado del alto cielo! Ayúdame Valentina, ya que tú volaste lejos. Dime de una vez por todas que arriba no hay tal mansión: mañana la ha de fundar el hombre con su razón... Ayúdame Valentina”.
O “Canto para una semilla”, permite a Violeta Parra projetar uma sensibilidade mais profunda
En la Carpa de La Reina. 1965
entre sua própria história e a do mundo de que fala, da nostalgia:”La vida me da recelo me espanta la indiferencia la mano de la inclemencia me ha echado este nudo ciego.  La fuerza me ha consumido y me ha atormentado el alma...” e de esperanças…“ si se calla el cantor, muere la rosa, de que sirve la rosa sin el canto. Debe el canto ser luz sobre los campos iluminando siempre a los de abajo. Que no calle el cantor, porque el silencio cobarde apaña la maldad que oprime.”  
Sofre por amor; corta os pulsos, amaldiçoa os ceus, “maldigo del alto cielo, la estrella con su reflejo, maldigo los azulejos, detellos del arroyuelo” […] “maldigo el fuego del horno porque mi alma está de luto. Maldigo los estatutos del tiempo con sus bochornos. Cuánto será mi dor.”[…]Maldigo lo perfumoso, porque mi anhelo está muerto…” Suicida.
O lirismo também se faz presente na composição “Gracias A La Vida”:
“Quero brotar na consciência do homem novo que luta por sua manhã, e proclamar seu tempo azul[...] graças à vida que me deu tanto. Deu-me a marcha de meus pés cansados, e com eles ando cidades, praias e desertos, montanhas e planícies...”
Sua história está ligada aos acontecimentos e a mostra em temas como “Al centro de la
Acto político de la revista El Siglo. 1948.
injusticia”; ou em “Yo canto a la diferencia: Yo paso el mes de septiembre Con el corazón crecido, de pena y de sufrimiento, al ver mi pueblo afligido. El pueblo amando a la patria y tan mal correspondido, la bandera por testigo...”Em outra estrofe acrescenta: “Afirmo, señor ministro, que se murió la verdad. Hoy día se jura en falso, por puro gusto no más. Engañan al inocente Sin ni una necesidad, Y arriba la libertad...”  Na composição “A Carta”, responde à noticia de que o irmão havia sido preso durante uma greve, ela diz: “y en esta carta me dice, que cayó preso mi hermano, así lo tema con grillos por las calles lo arrastaron, sí.”[…] “Yo que me encuentro tán lejo, esperando la noticia, me viene decir en la carta, que en mi pátria no hay justicia, los hambrientos piden el pan, os molesta la policía, sí.”
Também levantou sua voz para solidarizar com os operários, os mineiros, os pescadores e camponeses, nos períodos de dificuldades e perseguição política próprias das ditaduras civis ou militares do Chile, desde as décadas de 30 e 40. Muitos cantos surgem de sua inspiração
Violeta en Peñaflor. 1950
colhida nos avatares do povo, como faz em “Hace falta un guerrillero”, onde evoca a figura patriótica de Manuel Rodríguez: “Quisiera tener un hijo...de niño le enseñaría lo que se tiene que hacer cuando nos venden la patria como si fuera alfiler: Quiero un hijo guerrillero que la sepa defender. La patria ya tiene al cuello la soga de Lucifer; no hay alma que la defienda, ni obrero ni montañés; soldados hay por montones; ninguno como Manuel.” Ou quando reflete a euforia da juventude, dessas décadas, tão engajada com a conscientização política: “¡Qué vivan los estudiantes, jardín de las alegrías! Son aves que no se asustan de animal ni policía,  y no se asustan las balas ni ladrar de las jaurías...Caramba y zamba la cosa! qué viva la astronomia! Me gustan los estudiantes porque son la levadura del pan que saldrá del horno con toda su sabrosura para la boca del pobre que come con amargura. Caramba y zamba la cosa! viva la literatura!”
Desde o folclore mais genuíno fez dançar o povo e somou sua voz ao chamado de integração do continente no tema “Los pueblos americanos: Mi vida, los pueblos americanos, mi vida, se sienten acongojados, mi vida, porque los gobernadores, mi vida, los tienen tan separados, mi vida, los pueblos americanos. Cuándo será ese cuándo, señor fiscal, que la América sea sólo un pilar. Cuándo será ese cuándo,  señor fiscal.  Sólo un pilar ay sí,  y una bandera;  que terminen los ruidos en las fronteras. Por un puñado de tierra no quiero guerra”.
Por conseguinte, sua arte contribuiu para dar identidade àquele mesmo povo que em meio às mudanças traziam suas memórias.  Segundo palavras de Eduardo Martinez Bonatti, Violeta Parra “ es la única que puede pintar uma nueva crucifixión, es la única que nos da um mundo de concepciones donde los mitos, la magia, el reencuentro del ser humano, están planteados[...]
E continua: “Yo no veo lana en sus tejidos; como no veo óleo – pigmento con aceite-en sus pinturas. Veo el mundo total que Violeta entrega.”

Coletivo Violeta Parra

Nenhum comentário:

Postar um comentário